Las declaraciones que puede haber dicho el genocida Jorge Videla al periodista de la revista española Cambio 16 no creo sorprenda a nadie, por lo menos en lo que a mi respecta. Su enfermizo pensamiento e ideas no cambiaron para nada. Aún continúa viviendo en su oscuro planeta, mejor dicho, en su propio infierno donde debe ser un príncipe. Siempre partiendo de la base que los secuestros y ocultamiento de criaturas cuyos padres fueron sangrientamente masacrados, torturados, muertos; desapariciones y ejecuciones de adolescentes, vejaciones de mujeres, robo sistemático de bienes de sus víctimas y todo en el macabro plan de exterminio de seres humanos en el escenario del dolor y los sufrimientos extremos; para este individuo maléfico estuvo bien y lo reivindica. Imagínense sobre qué tipo de monstruo estamos hablando, por lo que vuelvo a repetir, no nos puede extrañar sobre lo que esta rata miserable genocida pueda expresar.
Lo que hay que poner realmente sobre el tapete y revisar, es lo que para mi es una falta de respeto a todo un pueblo y su sufrimiento por el señor periodista, que lanza a su medio extranjero, Cambio 16, (el equivalente en nuestro país a la revista "Noticias" de Fontevecchia) una entrevista de esta naturaleza a un personaje que hasta lo llama “general”, cosa que hace rato no lo es; y cuestionar los canales de llegada a un penado en perpetua por aberrantes crímenes de lesa humanidad. A mi parecer más que una nota reportaje es un insulto a todas sus víctimas, a las madres y abuelas de Plaza de Mayo, a nuestra triste historia reciente de los años más oscuros que nos tocó vivir. Pero también nos deja perplejos los fundamentos expuestos por este periodista , llamado Ricardo Angoso, que hace de su profesión un cinismo mórbido, de cómo dicen en su España, de “mala leche”. Ah! Mr. Angoso, también tiene sus ideas, es un reaccionario de la pluma y el bocho; reivindicador de los golpes de estado (caso Honduras)…también para él Chavez es un demonio… está todo dicho y vayan pensando, más que un reportaje es una siniestra operación de prensa de la derecha vernácula.
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